septiembre 27, 2011

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" La irregularidad, es decir, lo inesperado, la sorpresa o el estupor son elementos esenciales y característicos de la belleza."

Charles Baudelaire

septiembre 22, 2011

Considerando.

Me dices que soy lo que no quisieras saber, entonces
¿de qué me acusas si no te gusta mi café?

el primero con sabor extraño
el segundo se sirvió en un vaso mal seleccionado
el tercero en vez de azúcar llevaba sal

¿cómo estás?
porque el cuarto preparado ya está
dime si lo quieres probar

probar palabras que reflejan un vacío en mi esperanza
la alegría que sentí al escuchar sonar las campanas

estoy segura
compartieno con el sentido de sentir
con los recuerdos que no me llevan al frenesí

luz, instintos

¿lo estás saboreando?
porque yo quisiera ir perfeccionando
para cada día poder disfrutarlo

disfrutar de una dulzura que no empalaga
de una amargura que no desgasta
disfrutar de la temperatura que recorre mi estructura
de las cosas que habitan en Extremadura

la taza es grande y no tiene manga
avísame si volverás mañana
para desde temprano calentar el agua

no es imposible
solo necesitaba tiempo para descubrirme
existirme y habitarme
no enredarme no desgastarme

mejorarme.

septiembre 20, 2011

Incierto.

"Buenos días a la mente que me piensa".

No se qué de lo que se deba en esto que no es incierto. Que venga o se quede, me quiera o me espere. No sé si al final todo se trataba de relatividad.

Tan en tanto. ¡Salud! por los momentos cuando se ponen difíciles.

Aquí estamos, no hay problemas, aquí estamos. Reflexionamos sobre el futuro de nuestros abrazos.

Meditando.

No sollozando.

Respirando.

Recórcholis con el asunto de los cristalazos.

Sin reprocharnos, curioseando hasta que siembren en nuestro olfato. Aceptando que los remedios de amaranto no son cuatro y que las tardes soleadas de Aureliano no han llegado, esperaré paciente a que deseen enunciar algo nuevo mis labios.

Nubes ligeras transitando sin detener el tráfico. Adecuación. Necesitamos una adaptación:

Úrsula no está sola ni Macondo olvidado, las mariposas amarillas siguieron en el patio mientras nuestra epopeya se estaba citando. Momentos buenos, momentos malos. Experimentábamos si las mariposas no se nos irían volando, si acaso de nuestra historia querían saber algo.

Algo de un amor que no se acaba pero se marcha, de una espera que no teníamos contemplada.

Visión aislada por movimientos interrogantes, se trataba de un baile energizante.

...Scarlett Mizraim...